Hoy es viernes, y la verdad no tenemos muchas ganas de meternos en la cocina y pasarnos otra jornada laboral haciendo algo delicioso para poder convidar a la visita, amigos o llevar a la fiesta de los viernes que se hacen afterwork. Pedir en un restaurante o comprar en la pastelería de la esquina no es mala idea, pero no tiene ese toque y sabor que da la comida recién hecha en casa.
Las almendras contienen tantas proteínas como la carne misma, pero a la vez suman propiedades beneficiosas en cada pequeño bocado que le des a la receta que hoy te presentaremos.
Ingredientes:
500 g de garbanzo cocido
1 cebolla pequeña
10 aceitunas negras (opcional)
1 puñado de avellanas picadas
Una cucharada de sésamo tostado
1 huevo
50 gr de queso de untar
1 cucharada sopera de harina
100 g de pan rallado
Sal
Aceite de oliva
Preparación:
-Sofreír la cebolla, a fuego lento, muy confitada, unos diez minutos.
- Triturar los garbanzos. Mezclar con la cebolla, las aceitunas picadas, el sésamo y las avellanas.
- Hacer bolas, rebozar con harina, huevo y pan rallado.
- Freír en abundante aceite de oliva caliente, simplemente para conseguir el dorado, porque los garbanzos ya están cocidos.
- Acompañar de una salsa de yogur resultado de mezclar yogur con un poco de sal, pimienta y orégano.
